Hace un par de días hablaba sobre los errores que había tenido Xing con Rodolfo Carpintier a la hora de reclamar un pago. Tal y como supusimos, el problema origen había sido por una serie de errores administrativos de Xing que están solucionando, pero fuera del propio error que se origina, hay un detalle que nos tiene que llamar la atención y debemos tomar buena nota en todas las empresas. Velocidad de reacción manejando situaciones delicadas.
Cuando Rodolfo publicó el post el día 1 de octubre, por la mañana, el primer comentario que tiene en es post es de Maria Marín, responsable de Xing, a las 11:30 de la mañana, reconociendo el error de la empresa y planteando alternativas. A posteriori la empresa se pone en contacto tanto con Rodolfo junto con los afectados para arreglar ese fallo administrativo. Menos de dos horas en total y asunto resuelto. No queda ahí la cosa, porque el resto de medios que nos hacemos eco, como por ejemplo, en este blog, Maria Marín, también nos deja un comentario explicando el error de la empresa y facilitando un contacto para todas aquellas personas que se encuentran en una situación similar. ¿Lecciones? * Reconocer el error. todos nos equivocamos y cuanto antes se asuma mejor. * Velocidad de reacción. Antes de que comiencen a lanzarse despropósitos contra la empresa, quién primero tiene que reaccionar es la empresa afectada. * Colocar toda la maquinaria de la empresa a trabajar en el problema. Si ha habido una serie de errores se asumen, se resuelven y se plantean las alternativas que sean necesarias. * Fidelización al cliente. Una mera llamada telefónica puede bastar para disculparnos con los clientes afectados, en este caso Rodolfo y otros muchos, para que la normalidad vuelva a su cauce. Muchas empresas se pueden plantear dejar escapar al cliente antes de moverse o incluso reconocer ese error. Aquí no se habla de la rentabilidad de un cliente, se habla de la imagen de la empresa y en este caso particular, Xing ha manejado la situación de una manera impecable. bien hecho por todo el equipo de la empresa y tomemos nota de cómo se gestiona correctamente una situación crítica que puede dañar mucho la imagen de una empresa.
En Pymes y Autónomos | Caso Xing y Carpintier: cuidado con las cartas amenaza para cobrar