Dejando aparte el carácter provisional del anteproyecto de ley de la reforma del sistema de pensiones, teniendo en cuenta que puede haber modificaciones en su trámite parlamentario comprobar que esta reforma se caracteríza por un aumento de la flexibilización del sistema, que da varias posibilidades en función de la edad y los años cotizados a la hora de jubilarse.
Además la reforma se hace de manera progresiva, esto supone que durante el periodo transitorio hasta 2027 la edad y el periodo de cálculo irá variando año a año lo que obligará a kis trabajadores a "hacer números" constantemente para ver cuándo y cómo se podrán jubilar. De todas, este sistema es mejor que el de decretar un umbral para la puesta en marcha de la reforma y que los que se jubilaran antes de atravesar este umbral lo hicieran por el sistema actual mientras que los que lo hicieran después se tuvieran que adaptar al nuevo sistema.
El gran titular es que se eleva la edad de jubilación a los 67 años atendiendo a criterios demográficos y de sostenibilidad. Es un tema polémico con el que muchos están en desacuerdo, pero al final el criterio del Gobierno se ha impuesto. De todas formas, se flexibiliza esta edad para aquellas personas que cotizen una cantidad de años determinada, por lo que, al final, los que más hayan cotizado no tendrán que aumentar su vida laboral..
No se toca el periodo mínimo de cotización que da derecho a una pensión contributiva pero, sin embargo, si se amplia el periodo para el cáluclo de las pensiones, pasando de 15 a 25 años al final de la reforma. Esto parece ciertamente contradictorio ya que es muy posible que muchas personas se jubile cotizando los 15 años preceptivos, en ese caso ¿de dónde salen los otros 10 para calcular el importe resultante?
Al final lo que queda de este punto es que un buen número de trabajadores cotizarán el periodo mínimo y se beneficiarán de "complemento de mínimos", por lo que dará igual que cotizen 15 que 25 años. En mi opinión es una medida totalmente injusta que, en muchos casos, iguala a los que menos cotizan con los que lo hacen durante mucho más tiempo, salvo que se modifique o se elimine ese complemento.
Sobre la ampliación del periodo de cálculo, un importante colectivo agradecerá la medida. Hay una gran cantidad de trabajadores que han cotizado muchos años y ahora, pasados los 50 años, se ven sin empleo o con cotizaciones muy inferiores a las que tenían antes. La ampliación del periodo de cálculo va a favorecerles ya que, en la práctica, ahora mismo no siempres se cumple el principio de que las personas tiene base de cotización mayores cuanto más cerca están de la jubilación.
Es muy posible que, por contra, otros se vean perjudicados. Como siempre, la ventaja para unos es inconveniente para otros pero es evidente que la realidad de la situación actual del país requiere beneficiar a mucha gente que, cotizando mucho durante muchos años, ahora se ven en una situación que reduciría notablemente su pensión al computar sus bases de los últimos 15 años..
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