Lo anunciamos, la reforma de las pensiones estaba a nada de convalidarse. El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, la ha sacado adelante en el Congreso de los Diputados por mayoría absoluta,.
Esta reforma busca que las pensiones se mantengan ancladas al IPC mientras aumenta el número de jubilados por la generación del baby boom, y sus bases de cotización son mayores. Es decir, los autónomos deberán arrimar el hombro.
Los autónomos asumirán el 40% de los nuevos ingresos que necesitan las pensiones
Según la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) los autónomos deberán aportar el 40% de los ingresos adicionales necesarios para mantener las pensiones en 2032.
En enero de 2023 pudimos comprobar cómo el nuevo impuesto llamado Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) se tradujo en una subida de las cotizaciones. Los negocios con empleados a su cargo pagan un 0,5% más que asume la empresa y un 0,1% que asume el trabajador.
Si las previsiones de la Seguridad Social nos dicen que el Producto Interior Bruto (PIB) ascenderá a 1,8 billones de euros en 2032, el total de ingresos adicionales que obtendría la Seguridad Social destinados a sufragar el déficit de las pensiones rondaría los 20.000 millones en 2032, de los cuales, el 40% lo asumirán los autónomos.
Para ofrecer una cantidad más precisa, cada autónomo pagará 2.500 euros más en 2032 por la reforma de las pensiones.
Cambios y subidas en los impuestos para los autónomos si la reforma de las pensiones no funciona
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIRef), publicará y enviará a partir de marzo de 2025 al Gobierno, con un periodicidad trianual un Informe de Evaluación de las medidas adoptadas para fortalecer los ingresos del sistema público de pensiones de 2020-2050.
¿Qué quiere decir esto? Que si las medidas aprobadas (subida de impuestos) no funciona, el Gobierno deberá negociar con los interlocutores sociales otra propuesta para corregir, de forma equilibrada, el exceso de gasto en pensiones y esto se haría de dos formas:.
- Mediante otro aumento de las cotizaciones.
- Otra fórmula para incrementar los ingresos o una reducción del gasto en pensiones.
Si la reforma de las pensiones de Escrivá no sale bien y los números no son buenos, serán los trabajadores quienes verán aumentar sus cotizaciones. Incertidumbre es la palabra que mejor define esta reforma. Y los autónomos, una vez más, están presentes en el guión como protagonistas involuntarios.