Una de las decisiones más complicadas para todo gestor empresarial es el despedir a un miembro de la organización, una decisión para la que nos afanamos en buscar elementos objetivos, pero que aún encontrándolos no resulta para nada sencilla.
A este respecto hoy he encontrado un artículo en El Economista, en el que se detallan cuáles son las siete pautas o 'reglas' que debemos seguir a la hora de prescindir de un profesional, de manera que al identificar cualquiera de ellas, deberíamos tener 'luz verde' para hacerlo de manera justificada.
De tal modo que los perfiles de profesionales 'peligrosos' que obedecen a estas reglas son: los perturbadores, los que realizan falsas promesas, los que no luchan por los clientes, los vagos, los que se escaquean, los quejicas, y los que manifiestan una conducta inadecuada.
A pesar de que parece muy sencillo, y que el ahorro de costes prima ahora mucho más que hasta hace tan solo unos años, nos sigue costando tomar este tipo de determinación. Que bajo mi punto de vista, no ha de tener ningún tipo de excepción para los perfiles indicados, siempre y cuando lo hayamos advertido, y no se observe ninguna actitud para rectificarlo.
En Pymes y Autónomos | Del miedo de los empresarios al despedir
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