¿El tamaño importa? En muchos casos sí, y en otros no, pero si nos referimos al tamaño de la estructura de una empresa, en la actualidad sin duda no. En la actualidad una empresa de reducida dimensión pero de alto valor intangible, puede suponer una empresa mucho más grande e importante que una empresa que disponga de una muy alta infraestructura.
Lejos quedan aquellos tiempos en los que las empresas (no de todos los sectores, por supuesto. Ni esto sirve para todos los sectores) competían por haber quien tenía unas estructuras más grandes, más completas, más céntricas. A ver quien tenía unos cuarteles generales más grandes, a ver quien disponía de las mejores y más céntricas oficinas. Hoy una pequeña oficina (o ni eso), pero con una idea de valor, con un proyecto de valor puede ser mucho más importante que un edificio entero y no se cuantas fábricas.
Por supuesto que con el crecimiento de cualquier idea y de cualquier proyecto la empresa o el negocio que sea ira requiriendo adaptar nuestra estructura, pero mi consejo es el mismo, que nunca perdamos el mismo objetivo: la estructura cuanto más liviana y que se pueda modular mejor.
¿O es qué se encontrarían en la situación crítica actual como se encuentran muchas empresas que ahora aun y siendo grandes y buenas empresas, aun y manteniendo un buen número de ventas, se ven abocadas a la quiebra porque no pueden hacer frente a los costes que les supone su gran estructura? Sin duda, no. Y es que no es lo mismo mantener a un gran dinosaurio, que mantener a un ágil pajarito, eso sí un pajarito con un corazón de valor que vale por todo el dinosaurio.
En Pymes y autónomos | ¿El tamaño no importa? Imagen | mr_angeloux