En el nuevo plan contable, hace la aparición de un nuevo subgrupo dentro del inmovilizado que se denomina "inversiones inmobiliarias". La condicición para clasificar una edificación en esta subcuenta es que dicho inmovilizado se posea para obtener rentas, plusvalías o ambas. Quedan fuera por tanto de inversiones inmobiliarias aquellos terrenos y edificaciones que se usen en la producción o suministro de bienes o servicios, o bien aquellos que se usen en la gestión administrativa. En el caso de empresas inmobiliarias, tampoco tienen cabida aquí, ya que tambien se exceptúan aquellos que la venta sea el curso ordinario de las operaciones. Dentro del grupo II, se ha procedido a renumerar el inmovilizado inmaterial al subgrupo 20, y el inmovilizado material al subgrupo 21.
Aunque como no, la novedad más llamativa y desconocida a su vez, es la aparación de dos nuevos grupos; el 8 y el 9, que recogen los gastos e ingresos imputados directamente al patrimonio neto. Para que lo entendamos mejor, son gastos o ingresos derivados de la valoración de determinados activos y pasivos que no se recogen en la cuenta de pérdidas y ganancias. Por ejemplo, aquí contabilizaremos los gastos derivados de la valoración de los activos financieros disponibles para la venta. Estos grupos se cierran a cierre de ejercicio contra cuentas del subgrupo 13, de forma análoga al cierre del grupo 6 y 7 contra la cuenta 129. No obstante, y una buena noticia para la mayoría, es que estos grupos no aparecen como tal en el plan de contabilidad adaptado a Pymes.
Foto: TEYCO - Polígono Industrial Sant Vicenç, Castellbisbal
En Contabilidad: Nuevo Plan General de Contabilidad: Principales Cambios (I)