Muchas veces se nos olvida. Nos pagan por trabajar. No por gestionar el correo electrónico. En las empresas llega un momento en que si no ponemos orden en el correo electrónico nos sentimos desbordados. La situación es tal que muchos trabajadores se sienten esclavos del correo electrónico.
El número de correos que reciben a lo largo del día es tan alto que sienten una angustia sólo de pensar que tal día han salido de viaje y no han podido gestionar el correo electrónico. "Volveré dentro de dos día a la oficina y me pasaré media mañana limpiando la bandeja de entrada", es una frase muchas veces repetida.
Y es que el correo electrónico es uno de los principales ladrones de tiempo de nuestras jornadas laborales. Correos que van dirigidos a nosotros, correos en los que estamos en copia, correos de spam internos, correos privados que nos llegan a nuestra cuenta corporativa. Debemos considerar que el correo es una herramienta pensada para ayudarnos en la gestión de nuestro trabajo. No se puede convertir en un trabajo en sí mismo.
Una de las principales demandas para este tipo de usuarios es conseguir un móvil que permita gestionar el correo electrónico. De esta manera se aprovechan los tiempos muertos en salas de espera de aeropuertos, clientes, etc. Es un error, bajo mi juicio. De esta manera lo que hacemos es seguir fomentando el uso y abuso del correo.
Como empresas y como usuario debemos hacer un uso inteligente del correo electrónico. Ya es una cuestión más cultural que tecnológica. La lectura de correos en diagonal, de forma rápida y somera por no poder leerlos detenidamente es una pérdida de tiempo. Sería mejor avisar de tal o cuál documentación está disponible de manera que el usuario que tenga algo de tiempo lo revise en el momento adecuado en profundidad y para aquellos que sólo disponen de unos minutos se crea un resumen de dicho documento en el encabezamiento.
Es ya casi una cuestión fundamental de organización interna de la empresa que de herramientas técnicas que nos ayuden a gestionar el correo. Cada elemento técnico que se incorpora no hace menguar el número de correos que recibimos, sino más bien al contrario provoca que se aumente y esto es una cuestión que no se puede mantener indefinidamente. En algún momento tenemos que dejar de sentirnos esclavos del correo electrónico y dedicar todo el tiempo que ganamos a gestionar nuestras empresas.
En Tecnología Pyme | Correo electrónico, ¿propiedad de la empresa o del trabajador? Imagen | cohdra