Estás atrapado en el tráfico. Te vas a perder tu vuelo, y la reunión te la han cambiado al otro lado de la ciudad.
Tu presentación está mal ejecutada y vas a perder a tu cliente y, con él, tus opciones de promoción o quizás algo mucho peor.
Solo estos pensamientos nos producen ansiedad y, por eso, debemos tener el control sobre ellos para poder eliminarlos de nuestra mente.
Aunque parezca difícil hay una manera de ganar control sobre ellos de una manera sencilla y con disciplina.
Escribe lo que necesitas hacer y un plan para hacerlo.
Aborda las tareas desagradables en primer lugar para acabar con ellos.
Procrastinar sólo aumentará la ansiedad.
En ocasiones, simplemente es que estamos ociosos y pensamos demasiado en lo que hacemos y cómo lo hacemos, en este caso, es mejor buscar actividades adicionales para mantenerse ocupado y evitar la incubación de ideas que nos angustien.
Por último, pero no menos importante, debemos cuidar nuestro espacio e intentar mantenerlo organizado ya que un ambiente demasiado desorganizado puede afectarnos negativamente y puede resultar opresivo.
Imagen | geralt En Pymes y Autónomos | Cómo dejar atrás el estrés laboral