Ya hemos tratado el tema de los enemigos en el trabajo. Enemigo es un término fuerte, duro, pero real como la vida misma. ¿Pero qué pasa cuando a ese tipo de personas te las encuentras durante el proceso de búsqueda de empleo?
Buscar un trabajo, comenzar un proyecto, sea lo que sea, que tengamos entre manos, estará rodeado de obstáculos, entre ellos, la figura del "no te va a salir bien". Más que nunca, que la fuerza te acompañe y sobre todo, que tu motivación no la fulmine un comentario negativo (que no realista)
La competitividad existe desde que el mundo es mundo. En momentos donde conseguir un empleo es más complicado que llegar a Marte, no es de extrañar que el individualismo impere, y los profesionales del desánimo, también.
Si partimos de una base sólida: necesitamos un trabajo, estamos motivados, con ganas de lograrlo y contamos con una formación que nos puede garantizar, al menos, lograr una entrevista, respiremos hondo. Confianza.
El amargado o temeroso de que logres un puesto para el que también postula, o simplemente, disfruta viendo cómo otro no logra sus objetivos, tendrá preparada una batería de frases para minar tu moral.
Con ignorar sus malos augurios será suficiente, siempre que no pase a la acción, ya sabemos de lo que es capaz quien defiende lo que considera suyo.
La competitividad no es negativa si se sabe gestionar, de hecho competir puede ser una forma de autosuperación, considerando al otro no un rival, sino un punto de referencia.
Ese debe ser nuestro caso, el contar con unas gotas de ambición, sin olvidar la importancia del compañerismo y la colaboración dentro de un equipo.Dejemos en 'el lado oscuro' a todos aquellos que no nos van a acompañar durante nuestro camino laboral. Con su buena o mala intención sólo tienen un objetivo: que no logres prosperar.
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Imagen|Serge Saint