Hace unos días, leía la propuesta que está haciendo el Ministerio de Trabajo de gestionar un software que permita a los médicos conocer la cantidad de bajas laborales que ha tenido un trabajador. El argumento que abandera la propuesta es "frenar el abuso de este tipo de permisos por parte de los trabajadores".
Esta propuesta pone en entredicho varias cuestiones:
La profesionalidad de los médicos de familia, que actualmente son los responsables de dar la baja a los trabajadores.
La descentralización de la Sanidad impide que el Ministerio tenga todos los datos en su poder desde el primer día.
La utilidad de las Mutuas en los seguimientos de bajas por enfermedad es casi nula.
De entrada, se parte de la base de la mala fe del trabajador, dado que considera queel trabajador al más mínimo estornudo se da la baja. Esta cuestión de ética profesional, es muy cuestionable. Ni todos ls trabajadores son buenos, ni todos malos, pero las generalidades no traen nada coherente.
Por otro lado, la baja y el alta la dan los profesionales sanitarios, no se la toma el trabajador a su libre albedrío. Se pone totalmente en entredicho la prfesionalidad de los médicos, dado que dan por supuesto que dan bajas laborales a "tutti pleni".
Y otra cuestión, ¿que utillidad práctica va a tener este servicio? Supongamos un trabajador que en enero tuvo la gripe cuatro días, en febrero una gastroenteritis que le duró cinco días, en marzo una infección bacteriana que lo tuvo una semana en cama, y resulta que en abril se rompe una pierna ¿Que hace el médico, no darle la baja porque ya ha agotado su cupo de enfermedades anuales?
Los que tienen que meter mano en todos estos pocesos son los "dolientes pagadores y sufridores de las consecuencias" y estos son las empresas que sufren las consecuencias de la falta del trabajador, así como las Mutuas que tienen que asumir parte del coste de estas bajas.
Para las empresas, las bajas por enfermedad son un cancer económico y de estructura que les cuesta un verdadero dineral a lo largo del año. Y para el caso de las pequeñas empresas más todavía. Todos estamos hartos de seguir cotizando los dias de enfermedad y retribuyendo a los trabajadores en los periodos de baja.
¿Por qué no se promueve un seguro adicional para los trabajadores, soprtado por ellos mismos, de tal forma que le cubra el coste de su seguridad social y su salario? Si esta prima fuese función de las veces que se utiliza, os garantizo que absolutamente ningun trabajador se tomaría una baja por enfermedad si no fuera realmente necesaria.
Respecto a las mutuas, deberían realizar un seguimiento desde el primer día de la baja médica, no a los diez o quince días, y podrían realizar un sistema de evaluación conjunta con los medicos de familia. Es decir, dos profesionales sanitarios evaluan al paciente, pudiendo compartir los criterios de sus evaluaciones.
Por otro lado, la formación de una gran mutua, tal y como ya se está consiguiendo en el sector, generaría un conocimiento completo del historial del trabajador, sin necesidad de herramientas adicionales. El complemento ideal sería autorizar a las mutuas la potestad para dar bajas y altas laborales. Si esto fuera así, todos los trabajadores que abusan de las bajas médicas, verían como discuten con un médico sobre la realidad de sus dolencias.
Pero mirando el trasfondo de toda esta cuestión, si se promueven todas estas medidas, al fin y al cabo, ¿no daríamos pasos para privatizar nuestro sistema de Seguridad Social? ¿Realmente es tan bueno un sistema universal de prestaciones?