Superadas ya las etapas más complicadas de la pandemia de la covid-19, parece que hay cosas que han llegado para quedarse, como el teletrabajo o los ERTEs. De hecho, la aprobación de la reforma laboral creó una nueva figura conocida como ERTE permanente, también bautizado como RED, de Flexibilidad y Estabilidad en el Empleo.
Su objetivo es complementar a los actuales mecanismos de ERTEs en aquellas empresas que sufran una coyuntura desfavorable o que deban realizar esfuerzos estructurales para mantener su viabilidad.
En qué se parecen los ERTE permanentes con los antiguos ERTE
El nuevo mecanismo de los ERTE permanentes busca mantener a los trabajadores en las empresas o formarlos, con el objetivo de que sean capaces de reciclarse o de emplearse en otro negocio o sector. Tienen similitudes con los anteriores ERTE, ya que permiten que los trabajadores se puedan reducir la jornada laboral para evitar que la empresa recurra a despidos.
Además, al igual que los ERTE anteriores, las empresas beneficiarias de las reducciones de cuotas tendrán que devolverlas en caso de que el empleo no se mantenga durante los seis siguientes meses siguientes.
Sin embargo, existen una serie de diferencias entre los ERTEs permanentes y los anteriores mecanismos de regulación temporal de empleo:
- Preferencia por las reducciones de jornada: las empresas deberán priorizar las reducciones de jornada y solo en el caso de que esta no sea posible, se procederá a la suspensión del empleo.
- Duración de las ayudas: en caso de que exista acuerdo con los representantes de la plantilla, la duración de las ayudas será de 12 meses. En cambio, si no lo hay y la autoridad laboral lo aprueba, la duración de las prestaciones será de 6 meses.
- Nueva prestación de sostenibilidad del empleo, del 70 por ciento de la base reguladora sin que esta supere el 225 por ciento del IPREM. Esta ayuda podrá compatibilizarse con otro empleo a tiempo parcial.
Requisitos para el ERTE permanente
Las empresas que quieran acogerse a un RED y disfrutar de ciertos beneficios en materia de cotización deberán cumplir los siguientes requisitos:
- Por un lado, deberán mantener el empleo de sus trabajadores durante, al menos, los seis meses siguientes a la finalización del periodo de referencia de aplicación del ERTE.
- Se requerirá el desarrollo de acciones formativas en favor de los trabajadores afectados por una duración mínima en función del número de trabajadores.
- Se obligará, en algunos casos, a la recolocación del 20 por ciento de trabajadores afectados por un ERTE permanente.