Estamos ante la piedra angular de toda empresa cuando se plantea la cuestión del como gestionar el uso de un elemento tan importante como puede ser la utilización de impresoras. Este artículo se encuentra estrechamente relacionado con el anterior que hemos publicado, pero vamos a profundizar un poco más en el asunto. El ahorro de los costes de impresión pasa en primera instancia por la elección de la impresora correcta.
Puede parecer una obviedad, pero es muy común equivocarse en lo más básico, y mantener una serie de impresoras obsoletas o equivocarse a la hora de elegir una impresora, puede resultar una auténtica sangría de dinero para nuestra empresa. Conviene recordar también una serie de conceptos que ya hemos venido manejando en este espacio WorkForce Pro de Epson. Podemos estar seguros de que siempre erraremos al elegir una opción básicamente por su precio.
Lamentablemente debemos tener en consideración muchas variables a la hora de tomar una decisión definitiva. Tenemos que tener bien claro que tipo de trabajos se van a realizar primordialmente en nuestra oficina, si vamos a necesitar de color o no, si es mejor inyección de tinta o láser. Si vamos a tener mayoría de impresiones en blanco y negro, tal vez sea conveniente hacerse con una y realizar impresiones en color en una fotocopistería o imprenta.
Controlar cada pequeño detalle para ahorrar costes
Muchas son las variables que nos pueden influir a la hora de imprimir en nuestra oficina, cuanto mejor las controlemos, más ahorro nos traerá a fin de año. Calculos de empresas del sector demuestran que una correcta gestión de nuestros recursos acarrearán ahorros que rondan los 200 euros por trabajador, haced vuestros propios números. Pequeños trucos son los culpables de todo este ahorro.
Imprimir a un tamaño adecuado, intentando ampliar los márgenes de impresión de papel, con mayor número de palabras por página (controlando el tamaño de la fuente)a dos caras, a una calidad baja puede ayudar mucho en esto. En las impresoras de hoy en día, y para imprimir texto principalmente, una calidad de impresión "borrador" puede ser más que suficiente. Debemos tener en consideración que debemos y que no debemos imprimir.
Tal vez no sea necesario imprimir todo esos memorándums internos de la empresa, si tenemos la posibilidad de hacérselo llegar vía correo electrónico. También deberemos prestar atención al papel. Sí, todos sabemos cual es la marca de papel "rey" hoy en día, pero existen muchas posibilidades y en un "gramaje" más bajo de papel puede resultarnos más barato y conseguir idénticos resultados.
Un correcto mantenimiento de tu impresora también influye
Conseguir realizar un mantenimiento periódico de tu impresora contribuirá a un correcto funcionamiento de la misma, lo cual ya es un ahorro de por sí. Ni que decir cabe que las limpiezas y alineados de cabezales de nuestra impresora también supondrá ahorro. La impresora utilizará de esta manera la cantidad de tinta necesaria para realizar cada tarea de impresión, unos cabezales sucios y mal alineados pueden suponer más gasto de tinta.
Otro tema a tener en consideración son los consumibles de la impresora. Hoy en día tenemos multitud de oferta a la hora de elegir cartuchos de tinta o toner. Si vamos a utilizar una marca diferente a la proporcionada por el propio fabricante de la impresora deberemos estar atentos, no solo por incompatibilidades, sino por la cantidad de impresiones que podremos realizar con una u otra marca, que seguro variará.
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