El registro de jornada nació para luchar contra la precariedad laboral. La empresa tiene la obligación de llevar un registro horario de su plantilla. Si el trabajador tiene una jornada parcial y no existe un control, será reconocido como trabajador a tiempo completo.
La norma entró vigor en 2019 y desde ese momento hemos conocido sentencias llamativas y siempre a favor del empleado.
En caso de conflicto, la empresa debe probar que la jornada del trabajador es parcial
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia dictó en un fallo, el rechazo a los cálculos realizados por una empresa en el finiquito de una de sus trabajadoras. ¿La razón? El no contar con un registro horario tal y como dicta la ley.
Siendo claros, la ausencia de registro genera la presunción de existencia de una jornada a tiempo completo, por lo que es la empresa la que debe demostrar que la jornada del trabajador es a tiempo parcial y no la persona trabajadora demostrar que su jornada es a tiempo completo.
La ausencia de registro horario en la empresa conlleva sanciones
El registro horario se aplica a la totalidad de trabajadores, sin importar su categoría o grupo profesional. Tampoco es relevante el tamaño de la empresa.
Cuando no se cumpla la ley se podrán imponer sanciones a las empresas.
- Siendo las más leves de entre 60 y 625 euros. Entre las sanciones de este tipo figura el hecho de que la empresa no informe a los trabajadores de sus condiciones laborales o no ponga a su disposición informes de registro horario.
- Las multas graves varían entre los 625 y los 6.250 euros. Estas sanciones se darán cuando los trabajadores no cobren las horas extra que han efectuado o cuando no han sido computadas.
- Las sanciones más graves van de 6.250 a 187.515 euros. La multa se impone cuando el empleado ha hecho más de 80 horas extraordinarias, no se han registrado las horas extra correctamente o trabajadores menores de 18 años han realizado horas extra.
El artículo 12 del Estatuto de los Trabajadores lo deja claro respecto a los contratos parciales:
En el contrato deberá figurar el número de horas ordinarias de trabajo al día, a la semana, al mes o al año contratadas, así como el modo de su distribución según lo previsto en convenio colectivo
De no observarse estas exigencias, el contrato se presumirá celebrado a jornada completa, salvo prueba en contrario que acredite el carácter parcial de los servicios.
Después de cuatro años, algunas empresas desconocen la importancia de llevar un registro horario
Los empleados que teletrabajen también están incluidos en el registro de la jornada diario, al igual que comerciales, temporales, o cualquiera que mantenga una relación laboral total o parcialmente en ese centro de trabajo.
La norma no establece una modalidad específica o predeterminada para el registro diario de la jornada, limitándose a señalar que se debe llevar a cabo día a día e incluir el momento de inicio y finalización de la jornada.
Durante el confinamiento debido a la pandemia, las empresas se relajaron porque el teletrabajo se impuso. Pero no hay duda de que algo tan sencillo como contar con un registro de las horas que realizan los trabajadores no se cumple siempre.
Recientemente, una trabajadora de un hotel contaba en los medios de comunicación cómo 'fichaban' a una hora de entrada y de salida que no se correspondía con las horas que trabajaban.