Estos días de atrás ha estallado la polémica a cuenta de la iniciativa de Loli Carrillo, propietaria del Eric II, un bar restaurante situado en el Polígono industrial de Riuclar. Ante la crisis que afectaba a su negocio, hace un año decidió que las camareras sirvieran los almuerzo en lencería. Podéis ver sus declaraciones en este video en Noticiestarragona.cat. Y, como se podía prever, la polémica ha estallado, con las críticas de las asociaciones feministas.
A mi que queréis que diga, tanta histeria me sorprende. A pesar de ser hombre y heterosexual, y para disgusto de Loli Carrillo, creo que no soy su público objetivo. vamos, que no me acercaría a dicho local por ver un bustier bien puesto. Dicho lo cual, no acabo de entender tanta crítica a algo que es más viejo que el hilo negro.
Quizás en locales de hostelería ordinarios no se exprime tanto (aunque en más de un bar, de copas o no de copas, se juega a ello), pero creo que el caso de Hooters es bien conocido . Bien, me diréis algunos, también ha sido objeto de denuncias en su país de orígen, pero el caso es que el negocio no ha hecho más que expandirse. Y sin en país de la corrección política no han sido capaces de acabar con él, eso, de desde mi óptica liberal suscita alguna esperanza.
Por cierto, que curiosamente veo que el nivel de críticas es mucho menor para los que usan los torsos masculinos como reclamo, tipo Abercrombie&Fitch
Pero claro, aquí quienes son "usados" en esos photocalls con la clientela son hombres, y a esos les pueden ir dando o eso parece.
Para aquellos que piensan que la influencia del atractivo físico a la hora de hacer negocios es para clientes de polígono industrial o pijas buscando machos alfa, les recomendaría la entrada de estartap.com donde se afirma lo contrario en relación con los CEO atractivo (y por lo que se ve espacialmente las CEO, al hacerse eco de un estudio de Joseph T. Halford y Hung-Chia Hsu de la Universidad de Wisconsin:
Sus hallazgos sugieren que los directores ejecutivos más atractivos tienen una mayor compensación, ya que crean más valor para los accionistas a través de una mayor destreza negociadora y visibilidad. Cuando los ejecutivos de mejor aspecto aparecen en la televisión, sus acciones reciben un subidón exagerado, pero no solo eso, porque también son capaces de conseguir mejores condiciones en las fusiones con otras compañías.
Desde la noche de los tiempos el sexo vende, desde tiempos de maricastaña se introducen referencias eróticas en la publicidad y en las estrategias comerciales. Y yo me pregunto si sois conscientes de este tipo de herramientas para promocionar vuestros negocios y si las estáis empleando de algún modo.
Si tenéis dudas, os recuerdo que Loli ha incrementado su facturación en un 30%.
PD: por supuesto el cómo hacerlo es lo que demuestra inteligencia y adaptación. Pasarse de tono puede condenar nuestro negocio al ostracismo, echarle encima una imagen que no deseamos.
Vía | Noticiestarragona.cat Más información | Marketisimo