Para los bares y restaurantes hace tiempo que se abrió un nuevo nicho de mercado con el reparto a domicilio. Muchos de ellos no se planteaban ni siquiera esta alternativa porque no podían tener un repartidor y apostaban por aceptar pedidos para llevar y que el cliente pasara a recogerlos. Pero ahora con las plataformas de reparto a domicilio cualquiera puede intentar captar clientes en este mercado, aunque sacar beneficio ya es otra cuestión.
Porque un motivo para contratar con estas plataformas es ganar nuevos clientes, pero no sale gratis. En primer lugar porque todas operan de forma más o menos similar, se paga un canon por reparto, más o menos en función de lo que se facture a través de su plataforma. Pero después llega el segundo punto, tener visibilidad dentro del portal.
Y aquí es donde entra la competencia dentro del sector, porque al igual que una pizzería quiere aparecer en los primeros puestos, otra de la competencia también lo desea. La manera de mejorar es hacer una oferta mejor para la plataforma, mejores precios para sus clientes y menos márgenes para nosotros. No es algo exclusivo de los nuevos intermediarios del reparto a domicilio, también de aquellos que gestionan las reservas.
Si queremos más clientes hay que bajar precios, hacer mejores ofertas, reducir márgenes. Un modelo similar al de Groupon que tantas críticas recibió por el sector, ya que a final de mes dejaba escasos beneficios para los locales. Para ganar dinero es necesario que nos traigan una gran cantidad de nuevos clientes y además que repitan de forma más o menos periódica.
Las comisiones pueden ir desde el 14% al 40% dado que cuánto más atractiva sea la oferta más llamará la atención de los clientes y mejor posicionada estará. El problema es que en muchos casos la lucha de la competencia puede hacer que mañana les lleguen sus ofertas a nuestros clientes.
Por otra parte los negocios también hacen una inversión en publicidad para ser más conocidos en su ciudad. Visto como una campaña de marketing lo que nos queda es medir si los resultados son o no positivos. ¿Cuántos clientes nos han traído? ¿Cuántos han repetido? ¿Qué beneficio nos ha dejado cada uno?
¿Cuánto hemos gastado en esta campaña? Porque la clave es saber si ponemos este dinero para mejorar el SEO de nuestra página web, para poner anuncios en redes sociales o Google podemos ganar visibilidad y captar clientes igualmente, quizás con mejores resultados incluso.
Imagen | Hans