Uno de los elementos que se ha convertido casi en imprescindible para muchos trabajadores es el navegador GPS. Comerciales, repartidores y profesionales móviles en general lo utilizan como guía “infalible” (al menos casi siempre) en la que apoyarse para llegar a destinos que no conocen. La entrada en liza de los teléfonos de última generación y la incorporación de funcionalidades GPS en muchos de ellos los ha convertido en sustitutos más que interesantes de los tradicionales aparatos para el coche, y un caso especial al que prestar atención es el del iPhone, teléfono para el que dos de las grandes compañías en esto de la navegación han desarrollado aplicaciones.
El iPhone, al igual que otros terminales avanzados como BlackBerry y Nokia, lleva incorporado un sistema de navegación simple que se apoya en Google Maps y su conexión de datos para funcionar, pero que no llega a tener el nivel y prestaciones a las que nos tienen acostumbrados los navegadores tradicionales. Puede sacarnos de un apuro si vamos a pie, pero circulando en un vehículo es prácticamente inutilizable. Afortunadamente, parece que la cosa está cambiando gracias a la aparición de software específico para la navegación en la tienda de aplicaciones de Apple.
Dos compañías dedicadas a la fabricación de navegadores GPS tradicionales han probado suerte de momento con el dispositivo de Apple, Navigon, cuya aplicación ya está disponible y TomTom, que anunció la suya en la presentación del nuevo terminal pero que todavía no se puede adquirir. Nuestros compañeros de Applesfera han probado la primera, la de Navigon, y lo cierto es que les ha gustado la experiencia, realmente cercana en funciones y sensaciones a la que podemos tener con un GPS normal: locuciones, destinos favoritos, puntos de interés, etc., casi todo lo que nos encontramos en el típico aparato para el coche.
Vídeo promocional de TomTom
El iPhone es un teléfono caro, tanto por el terminal en sí como por la obligatoria tarifa de voz y datos que debe llevar asociada, pero si pensamos que se puede convertir en un buen sustituto de otros aparatos que también necesitamos utilizar (como el GPS en este caso) quizá la inversión merezca la pena. Los profesionales que os comentaba al principio, comerciales, repartidores, transportistas y cualquier profesional móvil pueden amortizar fácilmente la inversión si pensamos en el iPhone como en un auténtico dispositivo multifunción capaz de llevar a cabo con soltura las tareas de buena parte de los que utilizamos por separado.
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