Hay empresas en nuestro país a las que nuestras madres, abuelas, o tal vez a nosotros, nos resulten familiares por conocer su nombre gracias a los catálogos que veíamos por casa. Es el caso de Venca. Durante décadas, lo habitual era además de comprar en la tienda física, hacer pedidos por correo.
Los catálogos estaban bien elaborados, las fotografías eran atractivas y las explicaciones detalladas (algo que hoy día se echa en falta en algunas páginas web) Pero en este caso, sus más de 30 años de trayectoria la han convertido en una empresa experta en la venta de moda, textil y hogar, a través de catálogo y ahora en Internet no les va nada mal.
La empresa de venta por catálogo que se ha digitalizado
Cuando hablamos de la importancia de la formación en empresas tradicionales, en el caso de Venca, a pesar de contar con una tienda online de lo más intuitiva, llama la atención que sigan enviando a sus clientes un catálogo como antaño.
Con esta herramienta de marketing, en vez de recibir sólo un correo que puede acabar en la carpeta de SPAM o en la papelera, se aseguran de que el cliente, eche un vistazo al soporte en papel, con pocas páginas y siempre con alguna oferta o descuento que llame la atención.
La fusión del marketing de antaño y ahora, da buen resultado en las ventas
El perfil del cliente de Venca es el de una mujer de clase media, con independencia económica, ahorradora y abierta a una forma de comprar cómoda y moderna. Al menos eso dicen en su página, pero la realidad es que al leer las opiniones de las clientas, se comprueba que las hay de todas las edades y clases sociales.
Algo que se echa en falta en ocasiones, al comprar online es el trato cercano y el poder hablar de tú a tú con el vendedor para solucionar cualquier incidencia. El punto fuerte de Venca es la experiencia del trato al cliente.
Con una buena logística hace posible el envío de 22.000 paquetes cada día. Si pensamos que se creó en 1984, es loable que se hayan adaptado a las nuevas necesidades de las compradoras y no hayan caído en errores que cometen algunos emprendedores. Supongo que la experiencia es un grado.
Como crítica sería mejorable el tema de las devoluciones, ya que el cliente se ha acostumbrado a que un par de días todo quede solucionado y los gastos sean mínimos. Pero en cuanto a precios y prendas, poco tiene que envidiar a negocios foráneos. Es un excelente ejemplo de la frase: "El más fuerte es el que se adapta a los cambios".
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