En determinadas actividades los cambios de directivos o mandos intermedios es muy frecuente. Esto se hace especialmente relevante en la actividad comercial.
Si tu caso es este y trabajas para una organización en la que las reorganizaciones constantes son la norma, hay que estar preparado para afrontar un entorno cambiante.
Estrategias de supervivencia
- Presentarse
Es importante programar una reunión de uno a uno con tu nuevo jefe y llevar una copia de tu curriculum.
- Exponer tu estilo de trabajo
Indicando abiertamente tus puntos fuertes y tus objetivos.
- Mostrar espiritu colaborativo
Pregunta a tu jefe cómo le gusta comunicar, con qué frecuencia desea actualizaciones de estado, y la cantidad de detalles que busca en ellos. Lo importante es adaptar tu forma de trabajo a su estilo de dirección.
- Centrárse en el aprendizaje
Trata de ver la perspectiva de un nuevo jefe como una oportunidad para aprender.
- Compruebe su actitud
Un nuevo jefe es un reto, por eso, conviene canalizar nuestra energía en hacer contribuciones positivas para nuestro trabajo y la organización.
En definitiva, este tipo de organizaciones exige tener una actitud positiva al cambio e interpretarlo como una opción de aprendizaje que nos pueda enriquecer, personal y profesionalmente.
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