Hoy en día uno de los principales competidores del pequeño comercio de barrio podríamos decir que son los gigantes de la venta por Internet. Pero comprar en Amazon no sólo afecta al pequeño comercio, también al empleo y mucho más de lo que nos podemos imaginar.
El pequeño comercio es una de las fuentes principales de empleo de nuestro país. Si como resultado de este cambio de hábitos se reduce el número de tiendas abiertas la demanda de empleo del sector será mucho menor. Por mucho que el sector de la logística que alimenta el comercio electrónico crezca, no lo hará en igual medida que el empleo que destruye.
Destrucción de empleo, ¿la crisis o el ataque de Amazon?
Lo cierto es que es algo injusto, porque en un momento de recesión económica, donde además se ha sumado el fin de los alquileres de renta antigua, el pequeño comercio ha sufrido mucho y no todo ha sido como consecuencia de la implantación y llegada de los grandes vendedores internacionales a través de Internet.
También algunos de los gigantes del comercio de nuestro país han dado pasos importantes para vender por este canal como El Corte Inglés o Zara, por ejemplo. El resultado es que la cifra de empleados en el sector del comercio minorista se ha reducido aproximadamente en unas 76.000 personas, una caída del 3,8%.
Está por ver la cantidad de empleo que es capaz de absorver el sector de la logística
Aunque el sector de la logística ha aumentado con la creación de 29.500 nuevos puestos de trabajo, una mejora del 18% en toda España no compensa la destrucción de empleo del comercio minorista. Claro que esto también sería necesario matizarlo, dado que el descenso de la actividad económica también ha afectado con fuerza al sector logístico.
Reciclarse o resignarse
Lo cierto es que las transformaciones digitales siempre tienen un momento convulso, donde muchos profesionales tienen que reciclarse buscando en sectores emergentes su oportunidad. La logísticas sin duda puede ser uno de ellos pero no el único que se verá beneficiado por esta transformación digital.
Lo mismo se podría decir del pequeño comercio. Asociarse con el sector de la logística, ya sea como un punto de entrega donde los compradores pueden recoger sus envíos o vendiendo a través de estas plataformas algunos de sus productos sin necesidad de tener que abrir una tienda online.
De esta forma llegan a un mercado con millones de consumidores. Puede que los márgenes no sean tan altos, pero el volumen de ventas puede ser mucho mejor de lo que ellos conseguirían por sí solos. Es importante ver siempre con qué competencia cuentan dentro de la misma plataforma y si los productos que quieren vender son competitivos. No es fácil, pero tampoco imposible.
Lo cierto es que nada será como antes. La competencia no está a la vuelta de la esquina, está a sólo un clic de ratón. La transformación digital también llega al pequeño comercio en sus ventas y de esto dependerá en gran mediad sus posibilidades de generar empleo.
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