Vivimos en un contexto en el que la mayoría de los profesionales están sobrecualificados. La formación profesional no vende, y la sociedad nos ha ido arrastrando hacia una sociedad en la que no somos nadie si no tenemos la mayor cualificación posible. En estas circunstancias, la mayoría de expertos aseguran que existe una burbuja de posgrados que tiene visos de explotar en los próximos años.
En España, los estudios de postgrado no son un requisito obligatorio para optar a un puesto de trabajo. Y es que solo un 1,4% de las ofertas de trabajo solicitan personas con esta formación, según el IX Informe Infoempleo-Spring Professional sobre Postgrados con más empleabilidad. Este porcentaje no ha parado de bajar en los últimos años.
El año pasado, era del 1,7% y hace dos años, del 2%. Eso sí, el porcentaje se dispara cuando hablamos de ofertas dirigidas expresamente a candidatos con formación universitaria en las que se valora contar con un máster o postgrado, donde es el 35,2% de ellas las que solicita esta especialización.
Como no podía ser de otra manera, las ofertas que solicitan posgrado suelen ofrecer sueldos más elevados. Así, el salario medio de los profesionales con máster o posgrado es de casi 30.000 €, frente a los poco más de 25.000 € que ofrecen los profesionales con licenciatura, diplomatura o grado universitario o los 16.000 € de los trabajadores con enseñanza secundaria.
Por sectores, la enseñanza y la formación son ahora las que más valoran los estudios de postgrado, ya que se demanda en el 20,8% de las empresas de este tipo. El sector de calidad y medioambiente se encuentra en segunda posición (14,9%) y en tecer lugar vuelve a estar la Asesoría Jurídica, con un 14,5% de las ofertas pidiendo postgrados.