Las rebajas siempre habían sido una época donde las ventas se disparaban y las empresas aprovechaban para hacer su agosto. Sin embargo, la Confederación Española de Comercio (CEC está advirtiendo que las ventas de este 2019 están lejos de las expectativas, pues las ventas están cayendo en picado y los márgenes se están desplomando.
El presidente de esta Confederación achaca este descenso en las ventas al auge del comercio electrónico, y a esa fiebre de descuentos permanentes que está afectando de manera negativa los hábitos de consumo de los ciudadanos y que perjudican al pequeño comercio, que no pueden seguir el ritmo de promociones de las grandes empresas del sector.
El efecto psicológico que tienen las rebajas sobre los consumidores es cada vez menor. De hecho, muchos comerciantes tenían ya descuentos en sus establecimientos en las semanas previas al comienzo oficial de las rebajas, que tradicionalmente se venía celebrando en las jornadas posteriores al Día de Reyes, restando así impacto al efecto llamada que siempre provocan las épocas de descuentos y diluyendo, incluso, las ventas de la campaña navideña.
Todo ello ha provocado una caída en los márgenes empresariales que pocas empresas pueden soportar. No en vano, 2018 cerró con 6.698 pequeñas y medianas empresas de comercio menos que en 2017, lo que da una idea de la debacle que está sufriendo el sector, que al final se traduce en miles de dramas personales por el cierre patronal y la pérdida de miles de puestos de trabajo.
Desde la CEC han recordado que esta contención en el consumo también tiene como causa directa la caída en la confianza del consumidor, un índice adelantado que actualmente se encuentra muy por debajo de valores positivos, y que repercute directamente en las ventas del comercio minorista.