Según el último informe presentado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), los trabajadores asalariados triplican a los autónomos en siniestralidad laboral.
El perfil del trabajador autónomo con mayor riesgo de sufrir un accidente laboral en España es el de una mujer de entre 55 y 65 años dedicada al sector de la construcción y con menos de un año de experiencia. Otros datos de interés del informe son:
- La mayor incidencia de accidentes se produce los lunes
- La hora de más riesgo se sitúa en torno a las diez de la mañana.
- El índice de siniestralidad entre autónomos lo encabezan las comunidades de Extremadura, Castilla la Mancha, Navarra y Cantabria.
- Los mejores resultados los obtiene Cataluña, que ofrece la menor tasa de accidentes.
- La construcción sigue siendo el sector de mayor riesgo, con el doble de percances que industria y agricultura juntas
- Los hombres de entre 35 y 40 o las mujeres de 55 a 60 los más afectados.
- Los trabajadores con menos de un año de experiencia son los que más riesgo conllevan, siendo casi un 30% de todos los damnificados.
La incidencia de las bajas entre los autónomos que cotizan por contingencias profesionales es de 21,15 empleados por cada mil, frente a los 57,09 del Régimen General. Pero la diferencia es engañosa, porque no obedece a un menor número de accidentes o enfermedades en el ámbito laboral, sino a la resistencia de los trabajadores por cuenta propia a interrumpir su actividad por una dolencia o lesión.
De hecho, sólo el 40% de los autónomos que sufren percances se acoge a una baja. Según Lorenzo Amor, presidente de ATA “Un autónomo tiene que estar casi hospitalizado para causar baja porque le interesa más estar al pie de su actividad. En algunos casos sólo cobran unos 300 euros durante el primer mes”.
Seguramente este es el motivo por el que los trabajadores por cuenta propia que se dan de baja, lo hacen por más tiempo. 38 días al año de media, respecto a los 25 que suspenden su actividad los asalariados.
Con todos estos datos, lo más importante es recordar la importancia de la prevención de riesgos laborales del colectivo, muy especialmente entre los que llevan menos de un año de actividad. Algunas de las principales mutuas de accidentes de trabajo han detectado esta necesidad y llevan tiempo ofreciendo planes gratuitos para reducir la siniestralidad, específicos para autónomos y Pymes. Habla con tu mutua y pregúntale por ellos. Y empieza el año con buen pie.
En Pymes y Autónomos | La prevención de riesgos laborales es una inversión
Imagen | Sardá