El trabajo a tiempo parcial ocupa a un 14,8% de los ocupados en nuestro país. Esto supone un total de 2,81 millones de personas trabajando menos de 40 horas a la semana. Y es un índice que ha bajado un punto durante el pasado año. Y es que el trabajo a tiempo parcial es la opción menos deseada por los empleados en España según un reciente informe de Randstad.
Es una opción que aporta flexibilidad y para muchos colectivos puede ser la opción perfecta, como pueden ser estudiantes o trabajadores con hijos que ven en esta la única opción de conciliar. Además para otra parte no es la opción deseada y buscan un trabajo a tiempo completo mientras están contratados a tiempo parcial.
Un 57,3% afirma estar trabajando a tiempo parcial porque no ha encontrado trabajo a tiempo completo. Pero esto no cuadra con el número de trabajadores que están buscando otro trabajo. De los 1,61 millones de empleados que no están contentos con su ocupación parcial solo buscan cambiar de forma activa un total de 598.200 trabajadores a tiempo parcial según datos de la EPA y de ellos solo 363.600 buscan un empleo a tiempo completo, es decir un 13%.
Los trabajadores se apalancan, se conforman o se adaptan a estas jornadas parciales y no buscan una jornada completa de forma activa. Si comparamos la cantidad de empleo parcial con Europa lo cierto es que en España están muy lejos de la media. Actualmente hay 42,7 millones de personas en la UE trabajan a tiempo parcial, el 19,1% del total de ocupados, pero con picos que llegan al 26,5% en Alemania o al 49,5% en Países Bajos.
Y aquí habría que añadir a muchos autónomos a tiempo parcial, que no aparecerán en las estadísticas si no se han dado de alta, algo que para muchos no es posible por lo limitado de los ingresos que llegan a conseguir, en algunas ocasiones por debajo del salario mínimo y para los que ni siquiera la tarifa plana es una opción.
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