El nuevo sistema de cotizaciones que entró en vigor en 2023 supuso cambios para los autónomos, como elegir la cuota que les correspondía y las bases por las que cotizarían.
Fue en enero de 2024 cuando se actualizaron la cuota y el importe de las bases en función de sus ingresos. Según ese documento que ya ha sido publicado, tanto los autónomos colaboradores como los societarios mantendrán la misma base mínima que tenían el año pasado, es decir, 1.000 euros.
Sin embargo, con la subida del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), su cuota se ha visto incrementada.
La cuota mínima para los autónomos societarios en 2024
En su disposición transitoria séptima, la normativa estableció que algunos autónomos como los colaboradores o los trabajadores por cuenta propia al frente de sociedades mercantiles tendrían una base mínima distinta al resto de los autónomos.
Su base se fijó en 2023 en 1.000 euros al mes, sujeta a posibles cambios negociados siempre entre las asociaciones representativas de los autónomos y la Seguridad Social.
Los autónomos afectados son:
- Autónomos que ejerzan las funciones de dirección y gerencia que conlleve el desempeño del cargo de consejero o administrador.
- Autónomos que sean socios trabajadores de sociedades laborales.
A partir de este 2024 el tipo aplicable a la base de cotización será de 31,3%. Por lo tanto, la cuota mínima de todos estos autónomos, colaboradores y societarios desde este año pasará a ser de 313 euros al mes.
Más de 90 días como societarios si quieren aplicar la base mínima de 1.000 euros
Para poder beneficiarse de la orden de bases de cotización, los autónomos societarios tienen que acreditar que han estado más de 90 días en la actividad. Así, los autónomos que estén al menos 90 días en una sociedad, tendrán una base mínima de 1,000 euros y cotizarán por sus ingresos reales.
Cómo debe calcular un autónomo societario su cuota según sus ingresos
Ya hemos comentado que la cuota mínima para los autónomos societarios será de 313 euros, pero esto no significa que vaya a ser así para todos, puesto que la base depende de sus ingresos reales.
La fórmula que estableció la Seguridad Social para determinar la cuota que deben pagar los autónomos societarios es la siguiente: calcular primero los rendimientos netos anuales de la actividad, ingresos menos gastos deducibles, sumarle luego todas las cuotas que ha pagado el autónomo a la Seguridad Social durante el ejercicio y aplicar una reducción del 3% en concepto de gastos de imposible justificación.
Una vez obtenida la cifra, se divide entre 12. El resultado es el rendimiento neto mensual por el que deberán cotizar.
Una vez aplicada la fórmula, los autónomos societarios podrán saber en qué tramo de la tabla de cotizaciones se encuadran y saber cuál será su cuota mínima mensual, sabiendo que su base mínima de cotización es de 1.000 euros independientemente de sus rendimientos.