El año pasado el Gobierno tuvo que adaptar la Ley de Auditorías a los criterios y al nuevo marco normativo de la UE introduciendo cambios sustanciales para recuperar la confianza de los usuarios en la información económica financiera que se audita, en especial la de las entidades de interés público y de reforzar la calidad de las auditorías, fortaleciendo su independencia. La nueva Ley de Auditorías entra el vigor el viernes 17 de Junio.
La ley que fue aprobada en 2015 afecta sobre todo a las entidades de interés público y el objetivo de la misma es mejorar la calidad de las auditorías, fortaleciendo su independencia, para reforzar la confianza en la información económica y financiera.
La transparencia es otro de los objetivos de esta norma, la Ley pretende clarificar el papel del auditor e incrementar la información. Para ello se introduce en el artículo 5 la regulación del contenido del informe de auditoría de cuentas anuales. En general se establece un mayor contenido del informe de auditoría y especialmente para las entidades de interés público se les exige como novedad un informe adicional que se entregará a la comisión de auditoría.
Además se establece un nuevo período de rotación de diez años de contratación de auditores de cuentas en entidades de interés público, incluidas las prórrogas. Finalizado el mismo se podrá realizar una prórroga adicional hasta cuatro años, siempre que se haya contratado de forma simultánea a otro u otros auditores o sociedades de auditoría para actuar conjuntamente en este período adicional.
Además se aumenta el número de incompatibilidades, con hasta once servicios que el auditor no puede prestar a la sociedad auditada que sea Entidad de Interés Público destacando servicios de contabilidad, auditoría interna, abogacía o diseño de procedimientos de control interno o gestión de riesgos relacionados con la información financiera.
Como hemos visto la nueva ley afecta sobre todo a la gran empresa, pero no está de más tenerla en cuenta para las adaptaciones que se tengan que efectuar en las Pymes, teniendo en cuenta que una gran parte están eximidas de dicha circunstancia obligatoria si la empresa formula cuentas abreviadas, lo que implica que cuenta con menos de 50 empleados, activos por un valor inferior a los 4 millones y una cifra de negocios inferior a los 8 millones de euros.
En Pymes y Autonomos | ¿Qué empresas están obligadas a auditar sus cuentas?