Tanto la administración local, que paga en 60 días, como la autonómica, que lo hace en 39 días, y la estatal que también lo hace en 39 días, siguen incumpliendo los plazos que marca la ley de morosidad, establecidos en 30 días en el caso de las administraciones públicas.
Así lo confirma un nuevo informe, que ha realizado la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), sobre los plazos de morosidad de las administraciones públicas con los autónomos a cierre del primer trimestre de 2019.
Cantabria, Comunidad Valenciana, Murcia y Baleares son las tres comunidades que más tardan en pagar a sus proveedores. El caso de la comunidad presidida por Miguel Ángel Revilla es especialmente sangrante, pues triplica el plazo de la Ley de Morosidad al pagar en 90 días.
Aunque también hay comunidades cumplidoras. Este es el caso de Castilla y León, Galicia y Madrid, con tan solo 23 días de espera; País Vasco, con 25 y Navarra, Canarias y Andalucía con 27.
La administración local, la peor pagadora
Por su parte, la administración local es la peor pagadora. Sin embargo, hay casos que directamente son intolerables. Este es el caso de Jaén, el ayuntamiento que más tarda en pagar sus facturas de toda España.
Sus proveedores tienen que esperar una media de 531 días para recibir el cobro en su cuenta corriente. Sí, casi año y medio esperando a cobrar sus facturas. De hecho, los seis ayuntamientos que peor pagan a sus proveedores son todos andaluces.
Por el contrario, hay ayuntamientos cumplidores como Lugo (12 días de media), seguida del ayuntamiento de Roquetas de Mar y Torrent (13 días), Girona con 14 días de media, Cornellà y Barcelona con 16 días de media y Zamora y León, ambas 17 días de media.