A partir de mañana se espera que se dispare el número de autónomos al entrar en vigor la tarifa plana de la nueva ley de autónomos. Pero existen una serie de cuestiones a tener en cuenta que es interesante conocer para arrancar la actividad bien desde el primer día. Por eso vamos a ver que debes tener en cuenta si vas a darte de alta en 2018 como autónomo.
Siempre se puede acudir a un Punto de Atención al Emprendedor (PAE) donde darse de alta como autónomo o crear nuestra empresa en 24 es algo realmente rápido. Lo podemos hacer a través de internet, pero si tenemos dudas lo mejor es acudir a alguna oficina PAE que además suelen tienen asesores que nos ayudan a realizar los trámites y resuelven nuestras dudas.
¿Qué no se debe pasar por alto en el alta de Hacienda?
Si vamos a trabajar desde casa una cuestión muy importante al completar el modelo 036 o 037 en Hacienda es declarar la parte de la vivienda afecta a la actividad. Hay que tener en cuenta que la nueva ley de autónomos permite la deducción de un 30% de los suministros afectos a nuestra actividad económica.
Pero sobre esta cantidad hay que aplicar el porcentaje afecto de nuestra vivienda a nuestra actividad. Mejor declarar afecto un 30% que un 10% que luego se notará y mucho en lo que nos deducimos en el IRPF. Eso si, tampoco hay que pasarse. En todo caso tenemos que poder justificar siempre la parte afecta a la actividad.
Es muy habitual no tener claro en qué epígrafe nos tenemos que incluir. Esto es algo que se puede modificar después, pero mejor informarse antes para ir desde el principio tributando de forma adecuada, ya que no todos tienen las mismas obligaciones.
Cuidado con el alta en la Seguridad Social
Una vez realizada el alta en Hacienda podemos ir a la Seguridad Social para darnos de alta. Es muy importante solicitar la bonificación en la cuota de autónomos y solicitar la base de cotización adecuada. No todos tienen que darse de alta con la base mínima. Esto es más interesante sobre todo para los autónomos a medida que van cumpliendo años.
Es recomendable cotizar también por contingencias comunes. Pagas un poco más, pero lo recuperas y con creces si por cualquier motivo tienes que estar de baja. La cifra de los 50 euros es una barrera psicológica que muchas veces no nos deja ver más allá.
Te ahorrarás mucho tiempo y problemas
Lo ideal es ir de la mando de una asesoría profesional. Además es un gasto que como profesionales nos podremos desgravar llegado el momento. Nos guiarán en todo el proceso, nos explicarán cómo debemos facturar, que obligaciones fiscales vamos a tener y en qué plazos.
Lo mejor es tener alguien a quién recurrir si tenemos dudas sobre gastos deducibles
Sabremos cómo debe ser una factura para poder deducirla, que gastos estarían afectos a nuestra actividad y cuáles no. Pero también que otras cuestiones como seguros de vida o sanitarios, gastos de taxis o billetes de avión o gastos de comidas y hotel son deducibles y en qué límites.
Lo ideal además es disponer de un certificado digital desde el primer momento. Muchos de los trámites y cuestiones que vamos a estar obligados se pueden realizar telemáticamente y va a suponer un gran ahorro de tiempo, tanto si vamos de la mano de una asesoría como si nos gestionamos nosotros mismos.
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