Los compañeros de Genciencia nos han sorprendido con una entrada dedicada a mejorar la productividad mediante el uso de la música. En 1928, la corporación Muzak comenzó a comercializar bandas sonoras específicas para centros comerciales, mejorando las ventas un 17% en los establecimientos en los que se utilizaban sus bandas sonoras, dado que los clientes permanecían un 18% más de tiempo dentro de la tienda.
Los efectos de la música sobre el consumidor están perfectamente estudiados llegando a las siguientes conclusiones: * Según la mayoría de la gente, el tiempo vuela cuando te estás divirtiendo… pero si te gusta la música y te concentras en ella, el tiempo pasa más lentamente. * La música que no te gusta hace que el tiempo se contraiga y la música hace que la percepción del tiempo aumente. Al vendedor se le plantea un dilema: ¿es preferible utilizar la música para hacer más agradable la tienda o para hacer sentir a la gente que el tiempo pasa rápidamente?
Con esta tesitura, la corriente actual de ambientación musical de centros comerciales pasa por crear una propia identidad, por provocar que los clientes asocien la banda sonora del local, el estilo de música con nuestros artículos de tal manera que incitemos a su venta.
En esta estrategia de ambientación, recurrir a recursos audiovisuales que apoyen a la música, colores y decoración en línea con nuestros productos, temperatura más alta o más baja de lo habitual, pueden conseguir un espacio comercial distinto y con mejores ratios de venta. Parámetros de diseño y manipulación del confort para cuidar con detalle a la hora de provocar a un buen incremento en ventas.
Vía | Genciencia En Pymes y Autónomos | Música navideña: algunas recomendaciones sobre villancicos para locales comerciales, El coste de la música en nuestros negocios Vídeo | Youtube