El Verano acaba de terminar y, casi sin tiempo para darnos cuenta, comienza la Campaña de Navidad. Durante todo el año, los consumidores están expuestos a miles de campañas publicitarias que les incitan a toda la población a comprar productos, en muchos ocasiones casi sin necesidad. Y en esto, los grandes establecimientos comerciales tienen mucho que ver.
El consumismo puede ser uno de los peores enemigos de las pymes... o no. Si no podemos luchar contra nuestro enemigo, unámonos a él. Podemos aprovechar estas campañas para incrementar nuestras ventas y nuestra imagen de marca o podemos dejar que los grandes establecimientos acaben con nuestro negocio. Adaptarse o morir, he ahí la cuestión.
En épocas como la Navidad, las grandes marcas estudian el comportamiento del consumidor, saber cómo reconocer diferentes perfiles, cuáles son las tendencias actuales y futuras de compras y saber adaptarnos a los cambios.
Todas estas características se estudian para dar como resultado la campaña de marketing que mejor se adapta a los gustos y necesidades actuales de la clientela. A pesar de que las pymes no tienen capacidad para tener un departamento de marketing dedicado a estas cuestiones, la Navidad y otras épocas donde se eleva el consumismo a su máxima expresión han de ser las fechas claves en las que debemos preparar el terreno para lo que vendrá.
El consumismo puede causar un gran beneficio para nosotros. ¿Por qué no aprovecharlo?
En Pymes y Autónomos | Días Comerciales
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