Cuantas veces hemos oido que las crisis con periodos de cambio, que hay que aprovecharlas para re-inventarse y poder salir reforzados de ellas. Desde luego esa es la teoria, porque la práctica es bien distinta, se habló en su día de que debía de aprovecharse esta circunstancia económica para cambiar el modelo productivo de nuestro país, fomentar el desarrollo de las nuievas tecnologías, de la investigación, etc.
Se trataba de cambiar un modelo basado en el turismo, el comercio y, sobre todo, la construcción, por la potenciación de una industria moderna que generara empleo cualificado, una industria exportable y competitiva.
Han pasado varios meses, los Gobiernos (el central y los autonómicos) se han dedicado a subsidiar a las empresas del viejo modelo, con la amenaza de los miles de puestos de trabajo que dependen de ellas, y no hay ni rastro del apoyo a ese cambio, y si lo hay es de manera testimonial, casi ridícula.
El recorte presupuestario supone la rebaja de la inversión, el Ministerio de Ciencia e Innovación rebaja en 50 millones los proyectos de investigación, mientras, por otro lado, se destinan millones de euros al mantenimiento “artificial” de negocios prácticamente agotados.
Hace unos días se dió a conocer la creación por parte de la Xunta de Galicia de un fondo de capital-riesgo para financiar a las pymes tecnológicas gallegas. Un fondo dotado de 1.650.000 euros, con ese presupuesto ¿cuántos proyectos se pueden financiar? Mientras la Xunta anuncia a bombo y platillo ese fondo, una empresa de esa comunidad acaba de firmar un acuerdo de inversión, con un “verdadero” fondo de capital, que va a invertir 950.000 euros para que esta empresa, con un producto puntero, establezca una base en Estados Unidos y explote su negocio (con unas grandísimas posibilidades de éxito).
Hoy, para colmo, se anuncia que la Consellería de Traballo, de la propia Xunta, apoyará con 250.000 euros a grupos de investigadores que constituyan empresas de base tecnológica para poner en práctica su trabajo, con el objetivo de “crear negocios con un plus de competitividad e innovación”. Con esa medida preenden incentivar a 20 proyectos, lo que supone 12.500 euros por proyecto, ¿qué se puede hacer con 12.500 euros?
No se trata de que vengan los Gobiernos a crear empresas, pero sí de que gestione bien sus inversiones. Si no hay, que no haya para nadie, que no se fomente la agonía de empresas que no tienen futuro, que no se destinen millones a subsidios, mientras se deja de lado lo que a largo plazo puede ponernos a un auténtico nivel competitivo.
En Pymes y Autónomos | Cambiar el modelo económico
Imagen | =mc2