Mucho hemos hablado durante este año de la computación en la nube, una tecnología que ha avanzado mucho en su aceptación por parte de la empresa, pero de la que se espera que tenga una implantación mayor todavía. Por eso entre el repaso que le estamos dando a los retos tecnológicos en 2013 vamos a ver hoy el cloud computing.
Es una tecnología madura que la empresa lleva años utilizando en aplicaciones muy concretas, como el caso del correo electrónico, pero que ahora se ha expandido a otras que hasta hace poco era impensable tener en la nube, como el caso de la facturación, por citar un ejemplo. Pero también en hardware e infraestructuras ha crecido y aumentado la oferta que tienen a sus disposición las empresas.
Retrocesos en la percepción de cumplimiento de servicio
Si de 2012 tenemos que recordar algo relacionado con la nube, seguro que los fallos en el servicio de Amazon serán recordados por muchos. Porque no ha sido un sólo caso, sino que ha ocurrido en varias ocasiones. Además con un efecto altavoz muy grande, puesto muchos servicios online muy populares se alojan en Amazon. El problema es que si muchas empresas tenían dudas a la hora de externalizar alguna aplicación o servicio esto no ayuda nada.
Porque una de las dudas que podrían tener muchas empresas a la hora de ceder parte del control, se refuerzan cuando ven que un gigante del sector como Amazon sufre caídas de servicio a este nivel. Sobre todo se pueden ver perjudicadas las empresas más pequeñas que se dedican a prestar servicios en este sector.
El cloud no sólo es SaaS
El SaaS, Software as a Service es quizás la parte más visible del cloud. Pero no la única, y la plataforma en la nube PaaS así como las infraestructuras, IaaS, son dos de los aspectos donde más pueden crecer los porcentajes de adopción a lo largo de 2013, donde también van surgiendo más alternativas para elegir. Según van cambiando las necesidades de las empresas más se tenderá a adoptar este tipo de modelos.
Pero también tiene que vencer algunas reticencias de las empresas, sobre todo las pymes, donde existe aún mucho desconocimiento sobre el cloud computing en las empresas o la seguridad de los datos y la disponibilidad de los servicios son dos de los grandes temas por discutir en el futuro. Para las pymes de base más tecnológica son modelos que hacen viables negocios que quizás antes no lo eran.
Un modelo que beneficia a las nuevas empresas
Porque el cloud es un modelo que no requiere de tanta inversión inicial como lo que supondría montar un modelo semejante en las propias instalaciones de la empresa. Lo que ocurre es que muchas empresas necesitan amortizar el hardware propio que ya tienen antes de dar el paso, y el cambio de modelo no se producirá hasta que no llegue el momento de la renovación.
Sin embargo en el caso de las empresas de nueva creación el capital necesario a invertir para montar toda la infraestructura necesaria es mucho menor que en el caso de hacerlo a la manera tradicional. Y tal y como está hoy en día el acceso al crédito, esto es mucho decir.
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