Hace no mucho hubo unas declaraciones del presidente del Consejo Superior de Cámaras,
Javier Gómez-Navarro, en un programa de radio en el que exponía el punto de vista de las Cámaras ante la crisis y, sobre todo, las oportunidades que iba a ofrecer a España la presidencia rotatoria de la Unión Europea.
Durante la entrevista subrayó que durante los primeros seis meses de 2010 se iba contar con una oportunidad única para vender la imagen de España en el mundo, ya que la visión de nuestra economía en el exterior es que es reconocida por la calidad de nuestra industria alimentaria y el turismo (casi, casi la percepción que se tenía de Hispania desde los tiempos del Imperio Romano), pero hoy en día España ofrece mucho más, como son empresas tecnológicas de primer nivel (Indra, Telefónica, Abengoa, etc.) e industriales (Inditex, Repsol, Acciona, Gamesa, Endesa, etc.)
En teoría es una ocasión excepcional, para hacer branding de la marca España, a través de la elección de un buen logotipo corporativo (eu, con los colores de la bandera nacional). Hasta aquí todo bien, pero tras un mes, más o menos aceptable, de realización de una campaña de notoriedad para la búsqueda de la tan deseada internacionalización de la imagen de España, apareció, lo que en los medios de comunicación denominaron la “semana horribilis“, por una concatenación de acontecimientos francamente desafortunados.
Todo comenzó en el Foro de Davos, donde Roubini y posteriormente el Nobel de Economía, Kraughman, informan del riesgo que España supone para el euro. Para mayor deleite sensacionalista, durante la celebración del Foro, el presidente del gobierno (y de turno de la UE) ofrece una rueda de prensa junto con el presidente griego (el de mayor deuda pública de la UE) y el presidente de Letonia (el país que más desempleo presenta), una imagen para la especulación más agorera. También durante su estancia en Davos, unilateralmente, se emite una declaración de reforma de las pensiones incrementando la edad de jubilación. Continuó en el Desayuno de la Oración, ya que poco antes de su celebración, la Casa Blanca informa que el presidente norteamericano no acudirá a la cumbre Europa – USA que se celebrará en mayo en Madrid. Mientras tanto, en Paris, acontece la reunión franco- germana para analizar las soluciones a aplicar al excesivo endeudamiento de Grecia (soslayando a la presidencia de la UE). Consecuencias, desplome de la Bolsa española y el incremento del diferencial en 100 puntos del bono español con al bono alemán.
De momento la estrategia de branding que había ideado la delegación española no puede ser más desfavorable y hasta el momento lo único que se ha conseguido en gran medida es socavar la imagen de España en el exterior, no como país, si no como conjunto, y ha favorecido la especulación mediática de determinados medios extranjeros y un esfuerzo adicional para recuperar la situación inicial de partida.
Realmente esto es macroeconomía, pero manifiesta cómo se relacionan los entornos y cómo se puede llegar a producir una reacción en cadena de lo más contraproducente. A nivel micro, el empresario, el autónomo o el emprendedor han de estar siempre atentos al entorno que les rodea, o como se dice en en Economía de la Empresa, hay que estimular tener una visión holística de la empresa, analizando las variables exógenas (el ambiente externo en el que se desarrolla la actividad), las variables endógenas (el ambiente interno de la organización) y ver cual es la interrelación y los efectos de todas las variables en su conjunto. En caso contrario, si no se analiza con una visión global, los efectos pueden ser tan nefastos para la organización que no pueda llegar a superarlos. Simplificar la imagen de marca de una organización a un bonito logotipo y unas buenas intenciones, no es suficente.
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