La principal virtud que atesoran las personas de éxito es que son responsables de sus actos y asumen sus consecuencias, lo que no es demasiado habitual.
Cuando las cosas no funciona no buscan consuelo en la queja ni en las circunstancias ni, por supuesto, se escabullen para no asumir las consecuencias de las decisiones que toman.
Actitudes a evitar
- Criticar
Si tienen algo que decir lo dicen en persona y eluden las críticas innecesarios y, sobre todo, que no resulten constructivas para el equipo.
- Excusas
Si han cometido un error, asumen las consecuencias, pero no se esconden detrás de excusas futiles para descargarse de su responsabilidad.
- Falta de compromiso
Están comprometidos con su desempeño y lo hacen por mucho esfuerzo y tiempo que haya que dedicarlo.
- Asumen las directrices
Dar por sentado que las normas son para todos aunque en ocasiones nos podamos sentir perjudicados pero, lo importatne, es que son buenas para el grupo y es lo que más valoran.
- Prevalece la humildad
Pueden hablar de cuestiones económicas, aunque sean personales, pero nunca desde la jactancia y siempre desde la humildad.
- Valoran el aprendizaje
Si de verdad algo les va a aportar un valor añadido y les va a ayudar a aprender, no se lo pierden.
Pero sobre todo lo que más les importa es crear equipo y que todos los miembros se sientan representados y conscientes de su importancia en la ejecución de los objetivos.
Imagen | Claire_Sambrook En Pymes y Autónomos | ¿Qué opinas del éxito?