Estamos de campaña electoral y el cambio más notable respecto a campañas anteriores es que, en esta, la cantidad de gente joven que se ha decidido por dar un paso al frente, es llamativo.
Por regla general, esta gente, la gran mayoría millennials, es decir, nacidos entre 1981 y 1995 vienen de la mano de partidos de nuevo cuño que vienen a renovar el aire, un tanto rancio, que dominaba la política española.
En clave política la pregunta que surge es si estos jòvenes están preparados para liderar, en clave empresarial, también.
Recientemente, INSEAD realizó un informe abordando esta cuestión a nivel mundial. Los resultados del estudio muestran que la generación millennial es una generación de lo más ambiciosa, que tiene ganas de trabajar durísimo para llegar a convertirse en grandes líderes.
Sin embargo, quieren hacerlo por sí mismos, en trabajos que les proporcionen satisfacción y sentido de tal forma que puedan contribuir a la sociedad.
Aunque existen grandes diferencias en las distintas regiones, el 41% de los encuestados confirmó que era muy importante para ellos convertirse en un gran líder. La generación del milenio señaló su interés en el coaching y el mentoring como parte fundamental de un papel de liderazgo.
Por otro lado, sólo el 24% quiere alcanzar este puesto de una forma rápida. La mayoría (el 45%) quiere, crecer y aprender cosas nuevas poco a poco . Además un importante 73% eligió una buena conciliación entre vida personal y laboral antes que un salario más alto.
El aspecto más negativo que valora un millennial es no disponer de oportunidades de desarrollo, por lo que no cotemplan la opción de un trabajo que no ofrezca una carrera profesional o dead end job.
Imagen | darth87 En Pymes y Autónomos | Seniority, una resistencia que superar